Fidelina Martínez Castro
Fundadora del CEG-UES
Docente
Departamento de Filosofía
Facultad de Ciencias y Humanidades
Universidad de El Salvador
Entre los años 2002, 2003 en una muestra de 384 mujeres de la comunidad universitaria, el 96% de ellas consideraron que era importante “la creación institucional de un área de y en la Universidad de El Salvador que se encargue de potenciar en forma continua el desarrollo integral de las mujeres universitarias en lo inmediato y de las mujeres en general en lo mediato”.
La creación del Centro de Estudios de Género de la Universidad de El Salvador (CEG-UES) por acuerdo No. 026-2003-2007 (IV-21) del Consejo Superior Universitario en agosto de 2004, respondió a las necesidades de las mujeres de los sectores estudiantil y administrativo en la universidad.
Además la existencia del CEG-UES permite a la universidad ser consecuente con recomendaciones y compromisos internacionales que valoran como indispensable la equidad de género para hacer realidad el desarrollo integral de las sociedades.
Lo anterior se percibe por ejemplo en el literal c) del artículo No. 4 de la “Declaración Mundial sobre la Educación Superior en el siglo XXI: Visión y Acción” cuando dice: “han de fomentarse los estudios sobre género (o estudios relativos a la mujer) como campo específico que tiene un papel estratégico en la transformación de la educación superior y de la sociedad”.
De igual forma, en el “marco de acción prioritaria para el cambio y el desarrollo de la Educación Superior” de la mencionada Declaración se establece en el literal i) “Definir y aplicar políticas destinadas a eliminar en la enseñanza superior, todos los prejuicios fundados en el género y consolidar la participación de la mujer en todos los niveles y en todas las disciplinas en que esté poco representada en la actualidad y especialmente reforzar su intervención activa en la adopción de decisiones”.
Al estar la universidad inmersa en una sociedad patriarcal, en ellas se proyectan hábitos, costumbres, conocimientos, valoraciones y actitudes que se acomodan a las concepciones tradicionales respecto a las relaciones entre los géneros, lo que ha limitado que la UES desde su surgimiento en 1841 contara con lineamientos precisos que definieran y orientaran acciones concretas para superar las injusticias de género.
Ahora al aprobarse “La política de Equidad de Género” mediante acuerdo No. 064-2005-2007 (VII-2), del Consejo Superior Universitario se ha marcado un hito en la historia de nuestra universidad, dado que por primera vez, la UES cuenta con una Política de Equidad de Género que propugne por la realización de ciertos valores como son igualdad, desarrollo integral, equidad, justicia, democracia, respeto, solidaridad, paz y sustentabilidad con equidad de género y además, señale acciones específicas para superar las desigualdades de género en el quehacer universitario.
La Política de Equidad de Género de la Universidad de El Salvador, se constituye en un compromiso de todas las personas que conformamos la comunidad universitaria y por supuesto de las autoridades universitarias decana y decanos para incorporar acciones concretas, en las funciones de la universidad que erradiquen las desigualdades de género.
Dicha política debe ser interiorizada por la comunidad universitaria para convertirla en un instrumento de acción que permita hacer cambios en la universidad y en la sociedad salvadoreña.
Fundadora del CEG-UES
Docente
Departamento de Filosofía
Facultad de Ciencias y Humanidades
Universidad de El Salvador
Entre los años 2002, 2003 en una muestra de 384 mujeres de la comunidad universitaria, el 96% de ellas consideraron que era importante “la creación institucional de un área de y en la Universidad de El Salvador que se encargue de potenciar en forma continua el desarrollo integral de las mujeres universitarias en lo inmediato y de las mujeres en general en lo mediato”.
La creación del Centro de Estudios de Género de la Universidad de El Salvador (CEG-UES) por acuerdo No. 026-2003-2007 (IV-21) del Consejo Superior Universitario en agosto de 2004, respondió a las necesidades de las mujeres de los sectores estudiantil y administrativo en la universidad.
Además la existencia del CEG-UES permite a la universidad ser consecuente con recomendaciones y compromisos internacionales que valoran como indispensable la equidad de género para hacer realidad el desarrollo integral de las sociedades.
Lo anterior se percibe por ejemplo en el literal c) del artículo No. 4 de la “Declaración Mundial sobre la Educación Superior en el siglo XXI: Visión y Acción” cuando dice: “han de fomentarse los estudios sobre género (o estudios relativos a la mujer) como campo específico que tiene un papel estratégico en la transformación de la educación superior y de la sociedad”.
De igual forma, en el “marco de acción prioritaria para el cambio y el desarrollo de la Educación Superior” de la mencionada Declaración se establece en el literal i) “Definir y aplicar políticas destinadas a eliminar en la enseñanza superior, todos los prejuicios fundados en el género y consolidar la participación de la mujer en todos los niveles y en todas las disciplinas en que esté poco representada en la actualidad y especialmente reforzar su intervención activa en la adopción de decisiones”.
Al estar la universidad inmersa en una sociedad patriarcal, en ellas se proyectan hábitos, costumbres, conocimientos, valoraciones y actitudes que se acomodan a las concepciones tradicionales respecto a las relaciones entre los géneros, lo que ha limitado que la UES desde su surgimiento en 1841 contara con lineamientos precisos que definieran y orientaran acciones concretas para superar las injusticias de género.
Ahora al aprobarse “La política de Equidad de Género” mediante acuerdo No. 064-2005-2007 (VII-2), del Consejo Superior Universitario se ha marcado un hito en la historia de nuestra universidad, dado que por primera vez, la UES cuenta con una Política de Equidad de Género que propugne por la realización de ciertos valores como son igualdad, desarrollo integral, equidad, justicia, democracia, respeto, solidaridad, paz y sustentabilidad con equidad de género y además, señale acciones específicas para superar las desigualdades de género en el quehacer universitario.
La Política de Equidad de Género de la Universidad de El Salvador, se constituye en un compromiso de todas las personas que conformamos la comunidad universitaria y por supuesto de las autoridades universitarias decana y decanos para incorporar acciones concretas, en las funciones de la universidad que erradiquen las desigualdades de género.
Dicha política debe ser interiorizada por la comunidad universitaria para convertirla en un instrumento de acción que permita hacer cambios en la universidad y en la sociedad salvadoreña.
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